El Gobierno ha dado luz verde este martes a la mayor oferta de empleo público de la historia. A pesar de la ausencia de Presupuestos, el Consejo de Ministros ha aprobado la convocatoria de 40.146 plazas para este año, superando las 39.574 plazas aprobadas el año pasado. Esta cifra prácticamente duplica la primera convocatoria realizada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, que ascendió a 23.062 empleos públicos.
En el reparto de las plazas, del total de 40.146, la Administración General del Estado (AGE) absorberá 31.465. De estas, 20.840 serán de acceso libre y 10.625 serán para promoción interna, lo que representa el «cuarto récord consecutivo». Este reparto, según el ministro, «acelera la recuperación de empleo público iniciada en 2018 y revierte el proceso de envejecimiento de las plantillas».
Por áreas, 8.681 plazas estarán destinadas a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: 2.857 para el Cuerpo Nacional de Policía, 3.158 para la Guardia Civil y 2.666 para las Fuerzas Armadas.
El real decreto de oferta creará 9.102 empleos netos, de los cuales 4.940 serán plazas adicionales en sectores prioritarios y otras 4.162 utilizando instrumentos de planificación para dotar de nuevos servicios públicos a la ciudadanía. Dentro de este capítulo se incluyen 1.098 plazas para la Seguridad Social, la Base Logística Defensa, Aesia, CNMC, Museo del Prado y Puertos del Estado.
El Gobierno ha decidido reservar un 10 % de las plazas convocadas para personas con discapacidad, como una apuesta por el avance en inclusión. Específicamente, el ministro Escrivá confirmó que se han reservado 3.147 plazas para el turno de discapacidad, de las cuales 629 están destinadas a personas con discapacidad intelectual. Este grupo, según el ministro, es uno de los más vulnerables y con los que resulta más difícil trabajar en términos de empleabilidad.
El titular de Función Pública subrayó que «las personas con discapacidad intelectual pueden tener acceso al mercado de trabajo y pueden hacer tareas y las pueden hacer muy bien», destacando la importancia de esta medida para fomentar la inclusión laboral de este colectivo.
División en los sindicatos
Aunque la OPE de 2024 supera en número de plazas ofertadas a la del año pasado, la previsión del Gobierno no ha obtenido un apoyo unánime entre los sindicatos. Solo cuenta con la firma de UGT, mientras que CSIF y CCOO se han desmarcado.
Desde CSIF se considera que la OEP de este año no soluciona el déficit existente en las plantillas actuales y reduce la creación de empleo neto. Además, denuncian la falta de garantías a la hora de ejecutar los plazos y un abuso de contrataciones temporales. Por su parte, CCOO también cree que la previsión del Gobierno es «pobre» tanto en términos cuantitativos como cualitativos.